El CRO es una de las disciplinas de moda que más atrae la atención de los responsables de negocio digital. La razón es sencilla: produce importantes beneficios y un jugoso retorno sobre la inversión.
Pero como en toda industria, en torno a ella también se han generado en los últimos años muchos mitos, confusiones y medias verdades. Esto a menudo confunde a aquellos que se aproximan por primera vez a esta actividad y genera falsas expectativas en quienes se plantean implementarlo en su negocio.
Por eso, en este artículo te ayudaremos a desterrar algunos de los mitos más comunes asociados al CRO:
Mitos sobre CRO
1. CRO es Optimizar la tasa de Conversión
Empecemos por el principio: CRO (Conversion Rate Optimization) es mucho más que optimizar la tasa de conversión. En Marketing digital nos gustan mucho los acrónimos (SEO, PPC…) pero el término CRO no es suficiente para transmitir todo lo que hay implicado en una estrategia de optimización.
La tasa de conversión por supuesto es importante, pero no deja de ser una métrica y no siempre la principal. Prueba a reducir tus precios a la mitad y verás cómo se incrementa terriblemente tu tasa de conversión. Pero despídete de la rentabilidad y prepárate para morir.
CRO es un proceso sistemático y continuo de optimización enfocado en mejorar la eficiencia y maximizar el retorno y que envuelve un conocimiento profundo de las palancas de crecimiento del negocio, las necesidades de los usuarios y qué los frena de completar sus objetivos. Y que se desarrolla principalmente aplicando el método científico, mediante la propuesta de hipótesis y su validación con test, minimizando así el riesgo de tomar decisiones equivocadas.
Así que descarta la idea de que CRO es meramente hacer aumentar la tasa de conversión de tu sitio web.
2. CRO = A/B Testing
Quizá no un mito, pero sí es una confusión muy extendida. Mucha gente cree que CRO es lo mismo que hacer A/B Testing. Pero no. El A/B Testing es una parte, de hecho pequeña, del CRO. El foco de una estrategia CRO no debería basarse exclusivamente en esta actividad. Y esta nunca debería ser el punto de partida. La base sobre la que debe sustentarse un proyecto CRO es un buen análisis e investigación.
El CRO implica mucho más que hacer test. Es un proceso estratégico que tiene el potencial de transformar el negocio al completo.
De hecho hay casos en los que puede que el testing ni siquiera forme parte de la estrategia de optimización. ¿Por qué? Porque el A/B Testing requiere unos niveles de tráfico y conversión mínimos. Pero aún sin el suficiente tráfico, un sitio todavía se puede optimizar. Para ello pueden usarse otras técnicas como:
- Análisis heurísticos (de un especialista)
- User testing
- Mapas de calor, clics y scroll
- Grabaciones de sesiones
- Encuestas a clientes y prospectos
- Optimización del rendimiento (velocidad del sitio, etc…)
Lectura recomendada: CRO en sitios web con poco tráfico
3. El CRO es solo aplicar buenas prácticas
Nada más lejos de la realidad. Internet está lleno de artículos con cientos de buenas prácticas que debes aplicar en tu sitio y que prometen mejorarlo en un gran tanto por cierto. Pero aplicar así las buenas prácticas es un riesgo muy alto.
La realidad es que lo que funciona en un caso no tiene por qué funcionar en otro. Ni siquiera en negocios que pertenecen al mismo sector. A veces puede resultar difícil de creer, pero es real. Los test a menudo devuelven datos muy diferentes en sitios muy similares.
Las buenas prácticas, (o llamémoslas mejor posibles buenas prácticas) pueden ser una fuente de inspiración y una base sobre la que trabajar. Pero aún necesitan estar respaldadas por una exhaustiva investigación, ser priorizadas correctamente y testadas. Solo así ofrecerán el aprendizaje continuo que se busca con un proyecto de optimización.
4. El CRO es rápido
Existe una creencia de que el CRO es algo mágico que consiste en localizar y arreglar unas cuantas cositas por aquí y por allá y… voilá.
Quizá esta falsa expectativa es lo que hace que algunos tiren la toalla en los primeros meses, al ver que los test no producen los resultados deseados. O incluso aún produciendo buenos resultados piensan que ya es suficiente y que es mejor enfocar el presupuesto en otras tareas.
Pero el CRO es un proceso continuo que nunca acaba y que necesita tiempo para producir buenos resultados. No es fácil saber exactamente qué test tendrán más impacto. Pero si interrumpes un proyecto de optimización antes de tiempo, quizá tras encadenar unos cuantos test no ganadores puede que estés haciéndolo justo antes de que se produzcan los resultados que ansías.
Como dice Brian Massey de Conversion Sciences: «Sé paciente, diligente, decidido. Supera esos primeros test inconclusos antes de renunciar a la lucha».
Entonces, ¿cuánto tiempo debe durar un proyecto CRO? La respuesta es sencilla: continúa mientras el CRO te genere más de lo que inviertes.
Una inversión continua en un proyecto de optimización puede ser lo que necesitas para adelantar a tu competencia.
5. Todos los test deben ser ganadores
Sí, a todos nos gustaría que todos los test propuestos fueran ganadores, es decir que validen nuestras hipótesis. Pero esta es una idea que debes desterrar cuanto antes de tu mente. Si eso fuera así, entonces no haría falta testar nada, ¿no?
Acéptalo, habrá test perdedores. Pero todo test (también los “perdedores”) arroja información y es un valioso aprendizaje que permite mejorar las siguientes propuestas.
Todo los test (ganadores y perdedores) son un valioso aprendizaje que permite mejorar
Por ello, más que el ratio de test ganadores, lo principal es que la propuesta de estos responda a una clara estrategia de optimización. No vale disparar por disparar o copiar simplemente ideas de otros proyectos, sino que es necesario tener un gran conocimiento del proyecto y del usuario y formular hipótesis bien planteadas basadas en datos y respaldadas por un exhaustivo análisis.
6. El CRO es para validar opiniones personales
La verdad es que lo que menos importa cuando se trata de optimizar es lo que cada uno de nosotros piense. Lo que importa es lo que realmente funcione, y en todo caso lo que piense el usuario.
Tu opinión no importa
El objetivo de la optimización al final es maximizar el retorno e incrementar la eficiencia. Y para ello debemos mitigar todo lo posible nuestros sesgos para hacer más objetivas nuestras decisiones.
Sucede habitualmente que aquellas cosas que pensamos que deberían funcionar no lo hacen y viceversa.
Por eso es mucho mejor evitar la tentación de poner a prueba nuestras opiniones simplemente porque a nosotros nos parecen la mejor opción. Claro, toda idea es válida y bienvenida pero es mejor seguir un sistema de priorización lo más objetivo posible que nos indique claramente qué orden seguir y evitar nuestras preferencias personales.
¿Por qué hacer CRO?
Si ya tienes más o menos claro qué no es CRO, quizá ahora te preguntes por qué hacer CRO y qué beneficios puede tener en tu organización.
Te invitamos a que eches un vistazo a este artículo:
Lectura recomendada: Por qué es buen momento para hacer CRO
Y si te gustaría saber cómo podemos aplicarlo en tu caso, solo tienes que ponerte en contacto con nosotros y te lo contamos.